El Informe tiene como finalidad aproximarse a la realidad que enfrentan las personas con discapacidad al incorporarse al mercado laboral, identificando las principales barreras para la inclusión laboral de personas con discapacidad.
Este miércoles 26 de agosto, a través de un webinar, Pacto de Productividad Chile realizó la presentación oficial de su informe “Un acercamiento al panorama actual de la inclusión laboral en la Región Metropolitana Chile”. La actividad contó con las palabras de bienvenida de la representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Chile, Yolanda Martínez, de la presidenta de Fundación Descúbreme, Catalina Saieh y de la Seremi del Trabajo y Previsión Social de la Región Metropolitana, Denisse Madrid.
La falta de articulación entre los actores sociales que componen el ecosistema de la inclusión laboral en el país, es uno de los principales hallazgos del Informe desarrollado por el Programa Pacto de Productividad Chile. Ingrid Rojas, gerente de la iniciativa explicó que buscamos “implementar un Modelo colaborativo de inclusión laboral para promover la participación de personas con discapacidad en el mercado laboral. Para ello, trabajamos de manera articulada con los principales actores públicos y privados, considerando el camino recorrido y generando un modelo participativo, socializado y consensuado por todos los sectores”.
Al respecto Yolanda Martínez, representante del BID en Chile, explicó que “no hay mejor política pública que aquella que se hace de manera abierta y colaborativa con una base muy sólida de indicadores de lo que se quiere lograr. Pacto de Productividad Chile es un buen ejemplo. Como BID buscamos mejorar la calidad de vida de las personas de Latinoamérica y el Caribe y lo hacemos de distintas maneras, el financiamiento es uno de ellos, pero la verdadera magia sucede cuando estamos en un espacio como este, con instancias de gobierno y de sociedad civil. Lo que se genere desde este diagnóstico deberá ser siempre una mejora”.
El director regional de SENADIS Metropolitano, Francisco Subercaseaux, destacó que “en Chile contamos con 3.300 organizaciones de personas con discapacidad, sabemos que las necesidades son diversas porque también lo son los tipos de discapacidad y porque hay factores territoriales, políticos, legales y administrativos que influyen. Lo positivo es que contamos con la Ley de Inclusión Laboral, que tiene buena aceptación, pero requiere ajustes y tiempo para su implementación por parte de las empresas”.
Por su parte, la presidenta de Fundación Descúbreme, Catalina Saieh, comentó que “este programa convoca a toda la sociedad y al mundo del trabajo, para co-crear y reconocer un modelo común y una forma de trabajar con las personas con discapacidad que puede ser aplicado por todos. Pacto nos ofrece una hoja de ruta y también es una invitación a compartir el conocimiento que hay en el mundo y lo que hemos creado, para de esa manera perder los miedos y derribar las barreras que han existido hasta ahora”.
Barreras en la formación, para una inclusión laboral efectiva
De acuerdo con los hallazgos del informe, los diferentes actores sociales están preocupados por la brecha en formación para el trabajo en las personas con discapacidad, dado que aún es escaso el acceso a la educación superior y aún más el termino de los estudios superiores. Por otra parte, si bien existe una amplia gama en la oferta de capacitación en oficios, muchas veces éstos no se alinean con las exigencias del mercado laboral abierto. De esta forma, las personas con discapacidad se ven muchas veces restringidas de optar a cargos mejor remunerados y con mayor proyección de carrera. “Hay organizaciones que ofrecen programas de capacitación en oficios, sin embargo, éstos no siempre se imparten en sus áreas de interés o no les permiten acceder a ingresos que mejoren su calidad de vida”, señaló Ingrid Rojas.
Un elemento que se destaca en el informe son los miedos y prejuicios que poseen los empleadores en torno a la productividad y desempeño laboral de las personas con discapacidad. Esta aprensión produce que espacios laborales que pudiesen ser ocupados por personas con discapacidad se restrinjan y las empresas no se abran a la contratación de este grupo de la población.
Cabe destacar que, según la Dirección del Trabajo, a febrero de 2020 se habían contratado 22.906 personas con discapacidad, de éstas 19.303 contaban con relación laboral vigente. En cuanto a la actividad que desempeñaban, el 15,4% corresponde a asistentes, asesor, coordinador o encargado; un 14,7% a auxiliares de aseo, de cocina, de farmacia, entre otros; mientras que roles como directores, jefes o ejecutivos registran un 5,5%; y cargos de profesionales un 3,1%.
Finalmente, el informe realiza diferentes recomendaciones, entre las que se destacan que el Estado trabaje en el diseño de estándares de calidad sobre cómo aplicar la normativa en torno a la inclusión laboral y ejecutar con estándares definidos los procesos de inclusión laboral para este colectivo. Además, se propone capacitar a los relatores que dictarán los cursos en los que participen personas con discapacidad, que puedan ajustar los contenidos y metodologías de enseñanza para los participantes, con la finalidad de que se sientan con la seguridad de abordar a esta población, con apertura en mirada, basada en el conocimiento y acercamiento con la temática.
Para más información, el Informe estará disponible en el LinkedIn de Pacto de Productividad Chile