Promover, facilitar y difundir la inclusión de las personas con discapacidad cognitiva
Programas formativos en oficios, capacitaciones sociolaborales, inclusión laboral, oportunidades de crecimiento al interior de la empresa, accesibilidad en su sitio web, superar la dotación del 1% fijado por ley para personas con discapacidad y la promoción de un lenguaje inclusivo son algunos de los hitos que le valieron el reconocimiento nacional e internacional a esta empresa líder del rubro automotriz.
En el año 2011, SKBergé comenzó a desarrollar su programa de Responsabilidad Social Empresarial y entre los puntos a considerar, estaba la inclusión de personas con discapacidad al interior de la empresa. En esa fecha se toparon con que “no era prioridad país y no había nada: ni personas preparadas a nivel laboral ni redes de apoyo”, recordó Johana Trureo, Gerente de Personas de la empresa y asistente social de profesión.
“Nosotros queremos harto el programa de Inclusión Laboral SKBergé porque es uno de los desafíos más grandes que como empresa hemos enfrentado. Nos tocó abrir muchas puertas, hacer camino. Somos perseverantes y logramos algo lindo el año 2013. Comenzamos primero a impartir capacitaciones formales en el oficio de auxiliar de bodega y para ello nos vinculamos con la Escuela Santa Teresa de Ávila, ubicada en Recoleta, y que educa a personas con diferentes grados de discapacidad cognitiva, principalmente de entornos vulnerables”, detalló Trureo.
En este proceso fueron asesorados por Fundación Descúbreme, ya que, como indicó la gerente de personas, “nosotros teníamos las ganas de hacer inclusión, pero no contábamos con las herramientas profesionales para relacionarnos con ellos. En esto nos apoyó la fundación. Si bien en esa época llevaban pocos años desde su creación, tenían un equipo profesional experto y fueron los encargados de capacitar a nuestros relatores en el oficio a impartir, así como realizar el acompañamiento durante un año a los equipos de trabajo y personas con discapacidad que contratamos”.
Cabe destacar que estas capacitaciones formales realizadas por la empresa SKBergé tienen una duración mínima de 8 meses y son certificados por ChileValora bajo los mismos criterios que se evalúan las habilidades de cualquier profesional técnico sin discapacidad. Al lograr esto, el grupo automotriz se convirtió en la primera compañía nacional en obtener este reconocimiento para las personas con discapacidad. Trureo comentó que “creemos que las herramientas brindadas por nuestra compañía son los conocimientos sociolaborales para que puedan desarrollar sus talentos y buscar nuevas oportunidades laborales donde ellos elijan”.
La gerente explicó que “cuando comenzamos con las primeras inclusiones laborales nos dimos cuenta de que existía una ausencia en la normativa que los protegiera como ocurre con los trabajadores sin discapacidad. Esta llegó recién el 2018, cuando fue promulgada la Ley 21.015, o Ley de Inclusión Laboral para Personas con Discapacidad, por la expresidenta Michelle Bachelet en nuestras instalaciones”.
De acuerdo con lo publicado en el sitio web del Senadis, “la Ley Nº 21.015 de Inclusión Laboral tiene por finalidad promover una inclusión laboral eficaz de las personas con discapacidad, tanto en el ámbito público como en el privado”. Entre los puntos más destacados el ámbito del trabajo, esta normativa indica al menos el 1% de su dotación de personal debe pertenecer a este colectivo. Para conocer más puedes acceder al Reglamento del Sector Privado aquí: https://goo.gl/bhmHtF
En este sentido, SKBergé también supera las expectativas ya que, actualmente, su dotación de personal con discapacidad corresponde al 2%. En este sentido, Trureo comentó que “son la mejor contratación, muy productivos, no se desconcentran y con su alegría, compromiso y entusiasmo, contribuyen a un clima laboral positivo”, relevó la gerente de Personas, agregando: “generamos indicadores donde observamos que, tras aprendida una función, son constantes en su efectividad. Las personas con discapacidad tienen un gran nivel de concentración y compromiso a tal punto que muchas veces nos ha tocado recodarles sus horarios laborales para que puedan almorzar e irse a sus casas a la hora”.
Otro de los beneficios que abordó la gerente de Personas es a nivel del clima laboral. “El generar una cultura inclusiva nos permitió mejorar nuestro vocabulario hacia uno más inclusivo. Por ejemplo, a nivel corporativo ya no usamos el término ‘necesidades especiales ni diferentes’ o que nuestras piezas comunicacionales incluyen subtítulos y lengua de señas. A nivel personal, el trato diario dentro y fuera de la oficina es enriquecedor, de respeto y aprendizajes. Nos hemos dado cuenta de que sus capacidades exceden los prejuicios y que somos nosotros o la sociedad en su conjunto quienes les ponemos barreras y obstáculos”.
A raíz de esto, la profesional invitó a otras empresas a sumarse al desafío de la inclusión laboral. “Invitamos a las empresas a tomar un rol activo en la construcción de una sociedad más inclusiva. Quizás no tengamos respuesta concreta para muchos de los dolores de nuestro país, pero sí podemos ser un aporte. Debemos ser capaces de reflejar la diversidad al interior de nuestras organizaciones ya que la incorporación de diferentes miradas y experiencias contribuyen a mejorar los equipos de trabajo, siendo capaces de cocrear soluciones más innovadoras”.
Los avances en materia de inclusión laboral por esta empresa fueron reconocidos internacionalmente con el prestigioso premio “Zero Project Innovative Practice Award 2017” por el programa de inclusión laboral desarrollado en conjunto por SKBergé, Fundación Descúbreme, OTIC de la Cámara Chilena de la Construcción, ChileValora, Servicio Nacional de Capacitación y Empleo y Centro de Certificación Cámara de Comercio de Santiago.
Asimismo, fueron reconocidos por Senadis con el Sello Chile Inclusivo en dos oportunidades consecutivas (desde 2016 a 2019), en las 3 categorías del premio (accesibilidad web, accesibilidad universal e inclusión laboral).
